La superpoblación de conejos afecta al 60% de los cultivos de Monteagudo

 

Los agricultores alertan del progresivo aumento de los daños en cereal y olivos desde hace 6 años

Devoran los campos de cereal, roen las cortezas de los olivos, y perforan con sus madrigueras taludes y acequias de riego. La superpoblación de conejos que desde hace años sufre la Ribera parece no tener fin. En esta ocasión son los agricultores de Monteagudo los que se han unido para mostrar los perjuicios que la presencia de estos animales está provocando en sus campos y que, según apuntan, este año llegará a afectar al 60% de las 1.000 hectáreas de cultivo con las que cuenta la villa ribera.

Según indica el grupo de agricultores, formado por unos 20 vecinos, es difícil cuantificar económicamente estos daños, "y más teniendo en cuenta que las afecciones son tanto en cultivos como en infraestructuras de riego".

Lo que sí tienen muy presente es que estos daños comenzaron a ser importantes hace ahora 6 años y que no han parado de crecer "hasta convertirse en una plaga", como apunta el agricultor Eduardo Jarauta Jarauta.

Para intentar paliar esta situación, los cazadores de Monteagudo tienen permiso para capturar conejos en el coto -que comprende las citadas 1.000 hectáreas de Monteagudo y que es gestionado por el ayuntamiento- utilizando hurones y, probablemente, en breve recibirán autorización para cazar de noche. "Esto ayuda, pero no es la solución. Los cazadores salen porque les gusta y llega un momento que se cansan; y los agricultores, que también cazamos, nos tenemos que dedicar a nuestras labores de cultivo", explican Jesús Tomás Cornago y José Mª Tomás Martínez.

AYUDAS ECONÓMICAS

Actualmente, las únicas indemnizaciones por daños causados por conejos que reciben los agricultores de Monteagudo provienen de Agroseguro que aplica una franquicia del 20%.

En este sentido, los agricultores enviaron ayer una carta al ayuntamiento solicitando que, "hasta que se logre controlar la población de conejos, se haga cargo del importe que no sea cubierto por el seguro en las cosechas perjudicadas; y del total del daño que corresponda por las infraestructuras".

Además, solicitan que se exima a los agricultores del pago de la contribución rústica ya que, como apunta Jesús Tomás, "como no recibamos ayuda económica no vamos a poder seguir cultivando".

Aqui os dejamos el pdf con la versión escrita